lunes, 16 de mayo de 2011

Los Dementes - ¿como enfrentarlos?



        Desde hace poco tiempo sentí la necesidad de llegar a comprender porqué los trastornados desarrollan fases, apartados de su inteligente ser, de una manera tan incomprensible para las ciencias de la salud. Aún más, me preguntaba, como podrían permanecer latentes durante años en el cerebro humano, distorsiones, sin manifestarse hasta un momento muy concreto, cuando el sistema neurológico obra el milagro de las transformaciones químicas, necesarias y suficientes, para conducir a un sujeto a tal estado.
        A medida que escudriñaba en algunos artículos que trataban este tema en donde fuí sacudido con frases como esta de Heinrich Heine "La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca", descubrí variadas explicaciones e hipótesis múltiples en torno a este fenómeno, pero ninguna me convenció totalmente.
        Reflexionando sobre todo esto realizé una sórdida comparación entre el satori, la iluminación, éxtasis o como quieran llamarlo y la incomprendida, demencia.
Casi todos, en cierta forma, le tememos a los dementes. Seguramente no porque puedan parecernos seres irracionales, pervertidos y exentos de toda noción del sentido común, la moralidad, las formas y el ridículo. Lógicamente, como seres humanos le tememos a lo desconocido. Tememos de las impredecibles reacciones de los dementes frente a nosotros.
       Ahora, la pregunta es ¿como defendernos de un demente, causándole el menor daño posible? reducirlo sería lo más sensato pero ¿tendremos la preparación mental adecuada para no perder el control?.
        Creo que ante todo hay que tener muy claro que no estaríamos frente a un agresor comun, sino que más bién contra una persona con su mente bastante perturbada producto de una enfermedad psicológica de la cual cualquiera de nosotros podría llegar a ser presa.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario